Eduardo Chumpitaz
Graduado de la Maestría en Finanzas de ESAN | Auditoría Financiera | NIIF (IFRS) | Control Interno
La coyuntura económica actual se encuentra muy afectada por la presencia del Covid-19 debido a que la operatividad recurrente de muchas compañías y los resultados que se esperaban lograr han sido impactados negativamente. Existen muchos casos que lo reflejan, por ejemplo: cortes en la cadena de suministros, incumplimiento de los periodos de cobro y pago, operaciones detenidas en plantas de producción y almacenes, reducción de volúmenes de venta y precios inestables, retrasos en proyectos, dificultades para obtener financiamiento, alta volatilidad del valor de instrumentos financieros y otros. En línea con esta coyuntura surge la necesidad de identificar y evaluar las principales aplicaciones contables alineadas con las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF).
¿Cuáles son las principales aplicaciones a tener en cuenta?
Los siguientes puntos detallan las principales aplicaciones contables que pueden servir de guía durante el proceso de elaboración y presentación de estados financieros bajo NIIF:
1. Hechos posteriores (NIC 10):
Los eventos que ocurran desde la fecha de cierre hasta la fecha de presentación de estados financieros deben ser evaluados para verificar si brindan mayor alcance de aquellas condiciones que existían al cierre del periodo y determinar si pueden resultar en ajustes, revelaciones o si su consideración no influye materialmente en la lectura y toma de decisiones sobre los estados financieros.
Es probable que el Covid-19 y sus efectos se hayan presentado durante esta etapa de evaluación de la NIC 10, sin embargo, se debe considerar que es un evento ocurrido en el periodo 2020 y no se tenía conocimiento de su magnitud y la crisis que generaría al cierre del periodo 2019. En consecuencia, no implica algún ajuste significativo, pero si puede ser revelado indicando la naturaleza del evento y la estimación de su impacto financiero, dependiendo de qué tan relevante puede ser su inclusión para mejorar el entendimiento de los estados financieros.
2. Empresa en marcha (NIC 1):
La coyuntura actual genera una serie de incertidumbres que llevan a cuestionar la continuidad de un negocio o el cumplimiento del principio de empresa en marcha. Debe considerarse que declarar este incumplimiento, parte de una decisión corporativa. Esta situación podría darse si no se espera una recuperación suficiente y si las pérdidas continuas son inevitables. No obstante, en la actualidad se observa que la mayoría de las Gerencias están buscando las formas de reactivar sus negocios en el corto o mediano plazo, de manera que llegar a este incumplimiento es una situación extrema sustentada en nulas expectativas de recuperación.
Mantener el cumplimiento de este principio ante la situación actual exige una adecuada evaluación y presentación de información suficiente que soporte la continuidad del negocio, por ejemplo: sustentar los cambios razonables en el plan estratégico, actualización de los flujos de caja de acuerdo a los nuevos niveles de crecimiento, compromiso de la matriz de mantener el apoyo financiero y otros.
En caso de llegar al incumplimiento se deben preparar estados financieros cuyos saldos de activos y pasivos deben ser presentados a valores de realización o liquidación.
3. Deterioro de activos no financieros (NIC 36):
La evaluación de deterioro parte desde la identificación de indicios, es decir, primero se debe verificar si existen eventos que cuestionen si el valor de la UGE (Unidad Generadora de Efectivo) ha disminuido o si está sobrevaluada con respecto a su capacidad para generar efectivo. Al respecto, es evidente que el Covid-19 y sus efectos son indicios significativos con distintos impactos negativos, dependiendo del sector económico y las gestiones de cada Gerencia ante esta crisis.
Luego se debe proceder con la estimación del importe recuperable, que corresponde al mayor valor de comparar el valor razonable menos los costos de disposición contra el valor en uso, siendo este último el más usado en la práctica que se basa en el valor presente de la proyección de los flujos futuros que podrá generar la UGE.
Es importante revisar cuidadosamente los supuestos que son utilizados para el cálculo de los flujos futuros, es decir, se debe evaluar la razonabilidad de los precios de venta futuros, estimación de volúmenes vendidos, proyección de costos, medidas contingentes y otros. Estos supuestos deben ser consistentes con información presentada en reportes dirigidos a la Alta Dirección.
También se debe evaluar la razonabilidad de la tasa de descuento que se basa en la tasa libre de riesgo y el costo de la deuda, ante la coyuntura actual la primera tendería a la baja mientras que la segunda hacia el aumento. Deben incorporar los riesgos económicos financieros propios de la coyuntura actual y expectativas hacia los siguientes periodos.
Adicionalmente, si el deterioro de una plusvalía es determinado, registrado en un periodo intermedio y en el resto del período ocurren cambios coyunturales positivos que implican reversar la pérdida, se debe considerar que esta reversión no se admite en base a lo indicado en la CINIIF10 (Información Financiera Intermedia y Deterioro de Valor).
4. Valuación de Inventarios (NIC 2):
La medición del valor de inventarios se realiza comparando el valor más bajo entre su costo y el valor neto de realización (VNR), de este último su cálculo se basa en el precio estimado de venta menos los costos estimados para terminar su producción y llevar a cabo la venta.
Bajo la actual coyuntura, el precio estimado de venta será afectado hacia su baja generando un probable ajuste debido a los cambios en la demanda interna, las prioridades de consumo o la alta volatilidad en el precio de productos básicos (commodities), por ejemplo, es conocida la disminución del precio del petróleo a niveles mínimos históricos y debe considerarse que de este derivan muchos productos como combustibles, químicos y otros que probablemente también sean afectados.
Adicionalmente, otro costo estimado, tal como, el costo de almacenamiento puede aumentar debido al detenimiento de operaciones, bajos niveles de rotación por disminución de la demanda y otros.
Finalmente, es importante mencionar que, ante el cierre de una línea de producción, los costos fijos que ya no son imputados al costo del inventario, deben afectar directamente a los resultados del periodo.
5. Provisión de Pérdidas Esperadas (NIIF 9):
El Covid-19 afecta negativamente la capacidad de pago de los clientes y, en consecuencia, aumenta el riesgo de crédito que gestiona una Compañía, generando la necesidad de evaluar su impacto prospectivo en la estimación de pérdidas esperadas.
Todo hecho que afecte el riesgo de crédito, implicará ajustes en el modelo económico utilizado para el cálculo de pérdidas esperadas junto con proyecciones razonables y sustentables de las condiciones económicas futuras. En esta evaluación también se deben incluir los cambios en la política de periodos de cobro y en la nueva segmentación de las carteras de clientes en base a zona geográfica, sector económico y otros.
Este riesgo es común en compañías con carteras de clientes amplias y segmentadas como entidades bancarias, ventas de vehículos al crédito, servicios educativos y otros.
6. Modificación en Contratos de Arrendamiento (NIIF 16):
La falta de liquidez y/o cierre temporal de operaciones han generado que tanto el arrendador y el arrendatario, revisen y evalúen los acuerdos suscritos en los contratos. Por consiguiente, se debe identificar si los nuevos acuerdos serán una modificación o corresponden al cumplimiento de cláusulas inicialmente establecidas.
Una modificación implica un cambio en el alcance o en el pago, es decir, puede darse cuando se agrega o finaliza el derecho de usar uno o más activos, si se amplía o reduce el plazo contractual o si se reducen los pagos inicialmente acordados. Identificar una modificación implica volver a calcular el pasivo por arrendamiento con las nuevas condiciones y descontando los pagos con una tasa de descuento actualizada.
Por otro lado, si se mantiene el cumplimiento de cláusulas iniciales y solo es una variación en la modalidad de pagos, solo se debe evaluar si existe algún efecto en resultados. Por ejemplo, si no se realizan pagos durante 3 meses, pero después de este periodo los pagos aumentan proporcionalmente para cubrir lo no pagado, en esencia el contrato no ha sido modificado y solo es una variación en los pagos.
Finalmente se debe evaluar si las modificaciones a los contratos implican un indicio significativo de deterioro que afecte el activo por derecho en uso.
7. Plan de Reestructuración (NIC 37):
En la actual crisis algunas Compañías adoptarán vender o cerrar parte de sus negocios debido a que estas resultan inviables en el mediano y/o largo plazo. Partiendo de esta decisión, se debe evaluar si la Gerencia cuenta con un plan formal y detallado de reestructuración del negocio, el mismo que deberá ser comunicado formalmente al personal que sea afectado ante esta decisión. Luego de ser verificadas estas dos condiciones se debe proceder con la provisión de todos los pasivos relacionados al plan de reestructuración.
Adicionalmente, se debe evaluar la existencia de contratos onerosos, es decir, acuerdos que ante su incumplimiento generan una obligación con la otra parte, por ejemplo: penalidades por incumplir la ejecución de contratos, incremento de costos debido a reemplazo de personal infectado, compromiso de comprar materiales a un mayor precio y otros.
8. Subvenciones del Gobierno (NIC 20):
Se debe evaluar si alguna medida del Estado califica como una ayuda pública y si la Compañía cumple con las condiciones requeridas para obtener este derecho. Una vez verificados ambos puntos, se puede reconocer el derecho de cobro y el efecto en resultados.
Finalmente, en el caso de financiamientos otorgados por el Estado se debe evaluar la diferencia entre el valor en libros inicial del préstamo y el monto recibido, esta diferencia se considera una subvención del Estado y en consecuencia implica efecto en resultados.
9. Covenants:
Es importante evaluar los efectos del Covid-19 en los estados financieros ya que de estos depende la determinación de ratios o indicadores financieros que luego son comparados con los requeridos en un contrato de préstamo (evaluación de covenants).
El incumplimiento de ratios genera la inmediata obligatoriedad a corto plazo de toda la deuda y, por lo tanto, se deben reclasificar todos los saldos al periodo corriente.
En el caso de llegar a un acuerdo con la entidad financiera y obtener un permiso de incumplimiento, se debe suscribir el documento denominado “waiver” indicando una pronta regularización.
10. Riesgo de Liquidez:
La necesidad de gestionar liquidez bajo la coyuntura actual es muy crítica e inestable debido a la incertidumbre y expectativas de bajo o lento crecimiento en la generación de ingresos de los siguientes meses, por lo tanto, es importante evaluar qué medidas se adoptan para mitigar este riesgo. Por ejemplo, si se buscan formas alternativas de adelantar los cobros mediante venta de facturas, cumplir en el pago de proveedores mediante financiamientos u otros.
Adicionalmente existen otros riesgos financieros que deben ser evaluados dependiendo del nivel de impacto: riesgo de tipo de cambio, crédito y tasa de interés.
11. Información Financiera Intermedia (NIC 34):
La obligación de presentar información financiera intermedia surge como requerimiento de la Alta Dirección, entidades reguladoras o de la casa matriz. Además, se debe considerar que no hay excepciones en reconocimiento y medición de eventos durante un periodo intermedio, es decir, interinamente se pueden reconocer efectos contables significativos, sin embargo, depende de la evaluación de la Gerencia su inclusión o hacerle seguimiento hasta el cierre del periodo.
Del mismo modo, se debe evaluar y revelar una amplia descripción de los eventos y transacciones que son significativas para el entendimiento de los cambios en los estados financieros intermedios a comparación del último periodo cerrado, esta revelación implica reflejar el impacto financiero.
12. Otros impactos:
Existen otros impactos en los estados financieros que pueden estar afectados por el Covid-19, considerando lo siguiente:
- Contraprestación Variable (NIIF 15): La reducción de la demanda tiene efecto potencial en varios factores que son considerados en la evaluación de la contraprestación variable, por ejemplo: aumento de devoluciones esperadas, descuentos adicionales en precios, reducción de descuentos por volumen, penalidades por demoras en las entregas o futuras reducciones de precios. Por lo tanto, se debe evaluar qué factores están siendo afectados y proceder con los ajustes necesarios en los cálculos de contraprestación variable.
- Capitalización de Intereses (NIC 23): Se debe considerar que la ejecución de obras y desarrollo de activos aptos han sido detenidas, debido a las últimas órdenes de confinamiento, por lo tanto, la capitalización de intereses durante este periodo no es válida y deben reconocerse directamente en resultados.
- Impuesto a la Renta Diferido Activo (NIC 12): Se debe ajustar la estimación de resultados futuros en base a los efectos de la actual crisis y sobre estos evaluar la recuperabilidad del impuesto a la renta diferido activo relacionado.
Otros:
Evaluar los métodos de línea recta y unidades producidas, el primero se mantiene en su aplicación durante toda la vida útil del activo, por otro lado, en unidades producidas el efecto es cero debido a los cierres de planta e inoperatividad.
Evaluar la vida útil y el valor residual de activos fijos, activos intangibles y activos por derechos de uso.
Evaluar el impacto de la coyuntura actual en el desempeño de los planes de pagos basados en acciones.
Evaluar el impacto en los planes de pensiones: revisar los supuestos del cálculo actuarial y componentes de la tasa de descuento.
Conclusión
El Covid-19 tiene efectos económicos y financieros cuyas implicancias contables deben ser evaluadas con los lineamientos de las NIIF y el criterio especializado de cada Gerencia para poder reflejarlas de forma correcta en los estados financieros. Lo descrito en los párrafos previos sirve como una guía de ayuda, pero debe considerarse que los efectos pueden seguir aumentando en los siguientes meses y es importante que cada Gerencia los evalúe de forma oportuna y adecuada técnicamente.